El virus tiene una particularidad. No es una crisis que puede maquillarse y ocultarse. Los gobiernos que no han entendido eso, dolorosamente para su gente, han visto luego que, a pesar de maquillar cifras, en cuestión de días son abordados por una oleada inocultable de enfermos y muertos.
Los ejemplos más obvios en el continente son los casos de Ecuador (donde hay muertos que la gente tiene que incinerar en las calles) y EEUU (donde en Nueva York hay una enorme logística desplegada para apilar muertos en camiones refrigerados y están abarrotándose las morgues y crematorios).
Estas situaciones no se ven en Venezuela, al menos todavía hoy 1ro de abril. De hecho, si hubiera un ocultamiento, nuestra situación ahorita sería idéntica a la de esos países, dado que la Pandemia llegó acá casi al mismo tiempo que en los otros países de la región. Duélale a quién le duela, el gobierno ha estado muy bien asesorado en la materia y han gestionado la situación adecuadamente, hasta por encima de lo esperado por muchos. Aquí no caben frases politiqueras baratas y eso debemos admitirlo todos.
Hechos que han hecho la diferencia en Venezuela:
- El país tiene equipamiento de detección que China ha donado. Tanto es así que Maduro donó a Colombia y lo aceptaron, dos máquinas para producir en serie los kits de prueba.
- Venezuela está aplicando el despistaje masivo. Llevamos la cifra de despistaje más alta de Sudamérica por habitante. La estrategia es tal como lo hace Corea del Sur y Alemania.
- La Plataforma Patria, resultó ser muy útil para atender posibles casos. 16 millones de personas han llenado la encuesta en línea «Prevención COVID-19» y es una herramienta digital con información en tiempo real que el gobierno está usando para encontrar los casos. Vale decirlo, ningún otro gobierno sudamericano tiene una herramienta como www.patria.org.ve.
- A todos nos consta que la cuarentena masiva y total ha sido altamente acatada. La movilidad se redujo en un 85% de la población en días hábiles y sólo hay flujo moderado de gente por comida especialmente los sábados. Nos constan las calles desérticas y todos en sus casas. No ha sido así en varios países.
- Aquí se aplicó la cuarentena según la experiencia China. Fue de golpe, total, no a medias y poco a poco, como hicieron en Italia, España y algunos estados de EEUU.
- Venezuela fue el primer país latinoamericano en imponer restricciones de vuelos y fronteras terrestres.
- Fuimos el primer país latinoamericano en decretar la cuarentena total nacional.
- El uso de las fuerzas armadas y policiales sigue manteniendo a línea el flujo de personas.
- Antes de esta crisis sanitaria el país tenía reducción de la conectividad, del flujo turístico y de vuelos. No ha habido contagio como otros países de la región también por esa razón. El bloqueo económico es la causa de eso.
- La COVID-19 está demostrando que los países que pueden ganarle, no son precisamente los países más ricos, veamos a EEUU y Europa. Al virus le ganan los países donde su población está más organizada, donde hay más conciencia sobre el problema y donde hay más acatamiento a las medidas del gobierno. China venció la pandemia por eso. Nosotros también lo estamos haciendo.
Ante esto que se ha hecho, a nadie debería extrañarle que la cifra de contagios detectados sea baja, comparada con otros países.
Finalmente, aunque he expuesto elementos claros, – cosas que nos constan a todos- de por qué la situación está controlada, lo que debemos apreciar y es más importante, es que no hay indicios claros de que la situación este fuera de control.
Hay, eso sí, algunos contenidos falsos y chismes en redes sociales, que han logrado difundir miedo en un segmento de la población, con imágenes de Ecuador o incluso imágenes de Venezuela de momentos anteriores, en hospitales y afines. Pero ya deberíamos estar acostumbrados a los pescadores en río revuelto que, por razones políticas, intentan generar alarma en la población. Ya sabemos por qué lo hacen.
Si usted ve un contenido falso, rompa la cadena, no lo difunda, desmiéntalo, denúncielo como noticia falsa en las redes, reclámele al que se lo envió. Mantengamos la calma que hemos tenido estos días y difundamos solo información correcta y oficial.
Si usted cree que este mensaje puede informar y tranquilizar a alguien, compártalo en sus redes.